ALLine está basado en la filosofía de "todo en el interior", así que todos los elementos quedan en el interior de la cabina protegidos contra la suciedad y de golpes accidentales. La estructura puede ser opcionalmente de acero inoxidable, es extremadamente robusta y gracias a su diseño cautivador, se integra en la línea de producción.

El panel de control se encuentra en la parte superior, protegido contra líquidos en caso de lavado o pérdidas de productos. En las configuraciones estándar la cabina antinfortunio opcional, se integra perfectamente en la estructura base y prevé también el cierre del techo. Las puertas tienen una abertura particularmente ergonómica y poco voluminosa. 

El pasaje de los cables es completamente interno a la estructura para una mejor limpieza, protección de los mismos y también para una mejor vista estética. 

El cambio de formato es asistido por un microprocesador. Las regulaciones mecánicas se encuentran reducidas al mínimo, y han sido estudiadas para que cada elemento tenga una fiable repetibilidad de posición y un ajuste estable durante el funcionamiento.

ALLine se presenta en las siguientes configuraciones adaptadas a diferentes necesidades de etiquetado: